Leopoldo Marechal fue uno de los grandes novelistas argentinos y latinoamericanos. Durante años, formó parte de los grupos intelectuales que dominaban la cultura argentina, siendo uno de sus más destacados integrantes hasta que, un día, se emocionó viendo una manifestación peronista y decidió hacerse peronista.
De inmediato, la intelectualidad argentina dominada por la clase alta de tilingas como Victoria Ocampo o escritores como el refinado Adolfo Bioy Casares o el talentoso, pero odiador de todo lo popular, Jorge Luis Borges, lo apartaron por completo. No era cosa de que los contagiara del mal olor que tenían los pobres, a los que llamaban "negros" o "grasas" (por la grasa de las máquinas en las fábricas.
Después de la caída de Perón, el gobierno del dictador Aramburu lo persiguió y prohibió sus libros. Pasaron muchos años y Marechal quedó aislado y silenciado. Hasta que, en los años sesenta, la prestigiosa revista Primera Plana le dedicó la tapa y un extenso reportaje.
La nota lo sacó del olvido y su gran obra Adán Buenosayres (publicada en 1948 e ignorada por la crítica y los intelectuales) se convirtió en la novela más relevante de la literatura argentina y una de las más importantes de la literatura latinoamericana.
Adán Buenosayres fue escrita durante dieciocho años (1930-1948). El relato está hecho en tono de humor y epopeya. Sobre todo, impresiona el extraordinario empleo del lenguaje que, por momentos, llega a deslumbrar.
Lo demás que Marechal escribió, sus poemas, obras de teatro y novelas no alcanzan ni a la suela del Adán. Toda su obra lo hubiera ubicado como un buen escritor argentino, Adán Buenosayres lo eleva al parnaso de los escritores notables de Argentina y América Latina.
Leopoldo Marechal nació en Argentina en 1900 y murió en 1970.